La lucha por la igualdad desde
la República y ahora
en el Estado Plurinacional estuvo marcada por
tener lograr la mayor participación en los diferentes ámbitos
políticos y no políticos, esto sin duda
desnudo dentro nuestra realidad
diferentes matices.
Más dura fue la
lucha de la mujer en el área
rural donde por las normas existentes ahora
se obliga a la
alternancia de cargos dentro la función pública (50 mujeres
- 50 % varones), siendo casi por exclusividad un
terreno tan sólo destinado a los varones, y no tanto así para las
mujeres, rompiendo viejos
esquemas que concebían a la
mujer a vivir en la
vida privada y no asi publica;
sin duda alguna aquí se
pone énfasis en la participación real de la mujer
en la vida pública y al mismo
tiempo dedicarse a la vida privada, donde el núcleo familiar gira
en torno a la madre
de familia.
Chacha – Warmi un
imaginario de construcción de igualdad
de obligaciones y responsabilidades entre varones
y mujeres, donde se hace
relevante que la
construcción de los roles
de género son equitativas, desde
la misma cosmovisión andina el sol
tiene su función así como la luna, y que ambos
hacen que el medio ambiente en el
cual vivimos tenga su propio
equilibrio.
Por tanto, a existir
normativas que protegen a
la mujer, las
acciones planteadas a trabaja r
la equidad de entre
varones y mujeres debe
de trascender más allá
de simples cuñas
en medios masivos , así como de impresos, debemos de enfocar
nuestras fuerzas en sensibilizar y modificar
patrones de comportamiento que limitan tanto a varones y mujeres en generar
puntos de equilibrio en las
funciones que desempeñan como en
las responsabilidades, para así
tener en futuras
generaciones actitudes que
incluyan a todos y todas
con igualdad de oportunidades.
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